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La pandemia de la COVID-19 destacó la urgencia de investigar sobre agentes patógenos sin depender de laboratorios de nivel de bioseguridad 3 o 4 (BSL-3 o 4). Este trabajo presenta un modelo seguro en BSL-2 para el estudio de este virus en células Vero E6 transfectadas con la proteína Spike de SARS-CoV-2, facilitando así realizar investigaciones accesibles sobre este patógeno y otras enfermedades emergentes, para el desarrollo de tratamiento y búsqueda de nuevas dianas terapéuticas.
La COVID-19, causada por el virus SARS-CoV-2, fue declarada emergencia sanitaria el 11 de marzo de 2020 debido a la alta tasa de morbimortalidad registrada a nivel mundial [1, 2]. A pesar de que se han logrado avances científicos muy importantes frente a esta enfermedad, persisten casos graves y nuevas variantes de SARS-CoV-2 [3]. Por ello, el estudio de este virus fue y sigue siendo clave para mejorar las medidas de control y tratamiento, entre ellas la optimización de las vacunas, para reducir sus efectos adversos [4]. Sin embargo, para ello es indispensable el aislamiento y la manipulación del virus en laboratorios BSL-3, una instalación altamente especializada preparada para trabajar con virus que infectan a seres humanos, los cuales son escasos y poco accesibles; a diferencia de los laboratorios BSL-2 presentes en cualquier centro de investigaciones biológicas [5].
