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El desabastecimiento de medicamentos es un problema global que preocupa tanto a los pacientes y los profesionales sanitarios como a los gobiernos y la propia industria farmacéutica que se enfrenta a complicaciones en la fabricación, aprovisionamiento, incrementos repentinos en la demanda y dificultades para obtener las materias primas. La cadena de suministro de medicamentos es muy compleja, con muchos agentes implicados, y, sin embargo, está poco diversificada. En el presente trabajo se abordan las causas del desabastecimiento desde la perspectiva de la industria farmacéutica.
Introducción
A finales del año 2022, el antimicrobiano Amoxicilina en polvo para suspensión presentó un aumento en su demanda, solo o en combinación, en presentaciones pediátricas, debido a un incremento de infecciones respiratorias, especialmente bronquiolitis. Esto, unido a retrasos en la fabricación, tuvo como resultado su desabastecimiento [1]. En este caso, la AEMPS habilitó la posibilidad de su sustitución [2] directa por parte del farmacéutico de oficina de farmacia del frasco por la presentación en sobres [3], amparado por la necesidad de apoyar el sistema sanitario en una situación de urgencia. Francia también ha sufrido una situación similar con dicho antibiótico, e incluso con presentaciones de un medicamento tan utilizado como Paracetamol, del que se llegó a recomendar su limitación en la dispensación a tan solo unas pocas unidades por paciente; en el Reino Unido la situación se ha agudizado tras el Brexit [4].
