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El artículo es una puesta al día de las próximas vacunas y las nuevas tecnologías que vienen basadas en el RNAm y en los nanovectores lipídicos. La pandemia desatada por los coronavirus en todo el mundo ha revolucionado la fabricación de las vacunas. La fuerte inversión de los EEUU y de otros países ha acelerado técnicas, ya conocidas, pero sin desarrollar plenamente por falta de incentivos.
Se describen las variantes mejoradas de dichas vacunas en estudio, así como los proyectos de otras vacunas sobre virus ya conocidos y de otros virus, como el ébola, con las nuevas tecnologías.
Las nuevas tecnologías de fabricación de vacunas desarrolladas por causa de la pandemia del coronavirus (ya conocidas desde el año 2015, y antes algunas de ellas) han podido, gracias al aporte monetario de EEUU y, en menor cuantía, por otros países del primer mundo, desarrollar técnicas nanotecnológicas, así como la aparición de vectores complejos que han aumentado y que, en el futuro, aumentarán la respuesta inmunitaria. Ya el estudio -por parte de la EMA- de 200 variantes de las cinco vacunas presentadas a registro, actualmente autorizadas, da idea de la revolución actual en el campo de las vacunas en general y otras, incluidas algunas que no habían sido estudiadas hasta el momento. Estos métodos, una vez desarrollados, han demostrado ser válidos, rápidos y baratos en su fabricación.
