El uso de la fluidoterapia influye en un mejor pronóstico para los pacientes

La fluidoterapia es uno de los medicamentos más comunes en los pacientes que están ingresados en un hospital. El objetivo de la fluidoterapia es, entre otros, mantener y restaurar por vía intravenosa el volumen y la composición de los fluidos corporales, así como preservar y restaurar el equilibrio electrolítico. Es además el vehículo de administración de medicamentos por vía intravenosa. En el entorno perioperatorio supone, por tanto, un proceso fundamental.

Sin embargo, la fluidoterapia se ha considerado tradicionalmente una actuación secundaria en el proceso quirúrgico. Esta realidad ha cambiado en los últimos años. En la última década la Fluidoterapia está ganando protagonismo gracias a la evidencia clínica recogida, lo que repercute en un mejor pronóstico de los pacientes. Así lo han expuesto varios especialistas reunidos este martes en Madrid en la jornada formativa titulada ‘Manejo de la fluidoterapia en el entorno perioperatorio’, organizada con la colaboración de Baxter.

Durante el encuentro, el Dr. Rafael Uña Orejón, jefe del Servicio de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor del Hospital Universitario La Paz de Madrid, ha explicado que “los fluidos son medicamentos’ y, por tanto, debemos considerar su composición, indicaciones, contraindicaciones y el tiempo que se deben mantener. De este modo, se ha comprobado que actuaciones anteriormente desarrolladas según protocolos domésticos, con escasa justificación y que pueden tener impacto en el éxito o fracaso de una cirugía, ahora se desarrollan según evidencias clínicas sustentadas por estudios sólidos”.

De hecho, este especialista ha subrayado que “el cambio ha sido notable”. De los sueros que se empezaron a desarrollar en el siglo XIX se ha evolucionado “a soluciones meticulosamente balanceadas, diseñadas con una composición muy similar al plasma y con el PH ajustado para evitar alteraciones en el equilibrio ácido-base de los pacientes. El aumento de soluciones disponibles, tanto de reposición como de mantenimiento, así como sus distintas composiciones, ha obligado a los profesionales a mantenerse actualizados en estos temas”.

Al respecto, el Dr. Juan Víctor Lorente Olazábal, jefe de Servicio de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor del Hospital Universitario Juan Ramón Jiménez de Huelva, “estas nuevas soluciones mejoran claramente los resultados que obtenemos en el paciente quirúrgico, con lo que el clínico prescriptor de fluidoterapia tiene que estar en una constante evolución. Esta necesidad puede verse reflejada en el permanente el aumento de búsquedas relacionadas en las diferentes bases de datos. Es necesario actualizarse y leer de una forma crítica toda la evidencia científica que surge”.

Por su parte, la Dra. Rosalía Navarro Pérez, del Servicio de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor del Hospital Universitario Clínico San Carlos de Madrid, ha añadido que “se ha comprobado que tanto la fluidoterapia en exceso como la restricción aumentan la morbilidad del paciente y, por lo tanto, se debe considerar su importancia. De ahí que sean fundamentales cursos y enseñanza sobre cómo optimizar el manejo de la fluidoterapia. Los casos clínicos expuestos reflejan el conocimiento necesario para administrar la fluidoterapia a nuestros pacientes”.

Barcelona y Sevilla, próximas citas formativas sobre fluidoterapia

Esta formación dirigida a los profesionales implicados en el abordaje de la fluidoterapia en el entorno perioperatorio se celebrará también los próximos días 8 y 21 de mayo en Barcelona y Sevilla, respectivamente. En ellas, repetirá como ponente el Dr. Lorente, quien ha precisado que las sesiones están enfocadas a especialistas expertos y que en ellas se expone “la importancia de una fluidoterapia que se adapte a la fisiología de nuestros pacientes”.

Además, ha continuado, “queremos transmitir una actualización de la evidencia acontecida en los últimos cinco años, que ha sido muy profusa, para que resulte útil en el día a día de los compañeros en su práctica clínica y enfocar así una mejor atención centrada, sobre todo, en los resultados post operatorios del paciente, que siempre es el centro de nuestra actuación y actualización a todos los niveles”.