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Los complejos retos que plantean las terapias avanzadas requieren una especial colaboración público-privada entre todas las partes.
A las puertas de conocer próximamente la actualización del nuevo plan de abordaje de terapias avanzadas del Ministerio de Sanidad, ha tenido lugar el simposio ‘El futuro de las terapias avanzadas en España: Innovación, Acceso y Acción’, en el marco del 24º Congreso Nacional de Hospitales y Gestión Sanitaria de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA). Para centrar el debate, se ha presentado el documento de consenso ‘Retos y oportunidades en la era de las terapias avanzadas en España’, liderado por el Consorci de Salut i Social de Catalunya (CSC) con la colaboración de Pierre Fabre y la participación de expertos de todo el territorio nacional.
La mesa contó con la moderación del Dr. José Luis Poveda, gerente del Hospital La Fe de Valencia, y con una amplia representación de los distintos agentes implicados: el Dr. César Hernández, director general de Farmacia del Ministerio de Sanidad; la Dra. Laura Quintanilla, coordinadora de Terapias Avanzadas de la Comunidad de Madrid; el Dr. Manel Fontanet, técnico del área del medicamento del CatSalut; la Dra. Isabel Pineros, directora del Departamento de Acceso de Farmaindustria; y el Dr. Josep M. Guiu, director de Farmacia del Consorci Sanitari i Social de Catalunya.
Tras la presentación de las principales conclusiones del documento de consenso, se generó un debate que sirvió como eje pivotal del simposio, donde se destacó la necesidad de estandarizar procesos y protocolos de acceso, optimizar los modelos de evaluación y financiación, mejorar la colaboración público-privada y potenciar la capacitación específica de los profesionales sanitarios, como algunos de los principales desafíos en la implantación de las terapias avanzadas en España.
El simposio tuvo un denominador común: la colaboración público-privada como herramienta clave no solo para permitir el acceso temprano a estas terapias, sino también como garantía de sostenibilidad a largo plazo, en beneficio directo del paciente y del sistema sanitario.
En cuanto a los retos de los gestores sanitarios para facilitar el acceso a la innovación, Josep M. Guiu señaló:
“Es esencial una visión estratégica para gestionar el reto de la gobernanza colaborativa, mejorar la capacidad de adaptación normativa y trabajar en la gestión del impacto económico y los cambios organizativos a distintos niveles. Sin estos elementos, el riesgo es que la innovación llegue, pero no esté disponible para los pacientes”.
Y añadió: “Las terapias avanzadas plantean retos complejos, tanto desde el punto de vista organizativo como económico y clínico, por lo que estos encuentros permiten debatirlos en profundidad, facilitando la búsqueda de soluciones consensuadas”.
Por su parte, Álvaro Roca, Director de Market Access and Public Affairs en Pierre Fabre, destacó:
“Es importante facilitar el acceso a la innovación terapéutica dentro de un marco de sostenibilidad para el Sistema Nacional de Salud, así como garantizar una adopción conjunta que permita un acceso equitativo en todo el territorio nacional. A pesar de la necesidad de un marco general común que aporte certidumbre, también es necesario un enfoque específico para cada terapia”.
En la publicación se identifican además seis retos prioritarios para la implementación de las terapias avanzadas:
Optimizar los modelos de evaluación existentes o generar nuevos.
Mejorar el proceso de financiación y entrada al mercado.
Garantizar la sostenibilidad financiera dentro del Sistema Nacional de Salud.
Adaptar el marco normativo al contexto actual y a las características de estas terapias.
Agilizar los procesos de evaluación de terapias avanzadas.
Reducir la heterogeneidad e inequidad en el acceso entre Comunidades Autónomas.
